21 de agosto de 2012

Bienaventurados


Bienaventurados los necios, hijos de mil madres
y nietos de un surco de envidias que cuecen talismanes.
Bienaventurada sea tu lengua ponzoñosa
y el orgullo que siempre la domina.
Bienaventurada sea la cartera que somete este mundo
hecho a imagen y semejanza de un espíritu iletrado
con venas de estercolero.
Bienaventuradas sean tus uñas y las abejas que utilizas
en tu glorioso método de adelgazamiento:
Los gusanos disfrutarán, sin duda, al lamer tus huesos.
Bienaventurada sea tu mirada de cerdo gratinado
y el asco que me das cuando respiras invenciones.
Bienaventurados sean los magos azabaches
y la membrana gris que escupe las chimenea pudiente.
Bienaventurados los fatuos mentecatos,
apostados a mi vera para hacerme sentir humano.

A vosotros os dedico esta tentativa de poema
y os digo que en verdad heredaréis el desconcierto.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario