3 de junio de 2012

YO SOY EL ENEMIGO (2)

Bien, estás frente a mí y tu cuchilla
se va a insertar en mi torso;
pobre animal absurdo:
¿No sabes que yo soy el enemigo?

Está bien, todo va bien:
 Clavas tus ojos en mis ojos…
Tu acto es claro y considerado:
Los sobrantes como tú son bienvenidos
a mi liturgia de cadáveres.

Te vas acercando mansamente, con miedo,
todo está hecho. Eres uno de tantos
a los que voy enterrando en mi vergel
de amonestaciones.

Adecuado… 
Estás frente a mí
y tu sucia mano tiembla
cual bajel en arenas movedizas.

Enseguida estarás muerto,
rendido en el averno,
y yo cataré gratamente
otra copa de vino-vida
conmemorando que fuiste
uno de tantos.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario